Pertenece a la gran familia de quesos de pasta blanda cuya corteza se lava regularmente con agua salada, durante la maduración, para darle más ternura y sabor gracias al fermento rojo, el Brevibacterium linens. Tiene una corteza húmeda con reflejos anaranjados y cobrizos. Su sabor es constante y generoso sin ser demasiado corpulento. Se caracteriza por su textura fundente, ideal para comer caliente o con cuchara.
Chaumes Le Cremier
Pertenece a la gran familia de quesos de pasta blanda cuya corteza se lava regularmente con agua salada, durante la maduración, para darle más ternura y sabor gracias al fermento rojo, el Brevibacterium linens. Tiene una corteza húmeda con reflejos anaranjados y cobrizos. Su sabor es constante y generoso sin ser demasiado corpulento. Se caracteriza por su textura fundente, ideal para comer caliente o con cuchara.
El sabor concentrado por su corteza lavada va bien con los vinos blancos secos. En caso de optar por un tinto, los vinos de Burdeos son la mejor opción.
Esta quesería procesa leche de productores de la región.
El queso Chaumes Le Cremier sale de las cavas de maduración al cabo de tres o cuatro semanas, momento en el que adquiere esa textura tan flexible y blanda que es la base de su identidad.
Chaumes Le Cremier con su pasta flexible y fundente es típicamente un queso para el final de una comida. Capaz de encantar a todos los paladares.
Asentada en el corazón del Périgord, zona conocida por las casas de campo, los viñedos y la gastronomía y donde se registran asentamientos humanos desde la prehistoria.
La quesería de Saint-Antoine-de-Breuilh es especialista en quesos blandos con corteza lavada y fabrica quesos de carácter y especialidades regionales como Le Véritable Chaumes.